Yo creo que todos los que leen este bló han visto "Figth Club" y les gusto (y si no...¿que diablos hacen en mi bló? shushushu, larguensé de aqui) y por lo tanto recordaran la escena de las "cuevas de poder", yo les cuento sobre la mia:
Esta cubierta de piedras, en algunas partes parece que hay grava bajo los pies; sin embargo, en uno de sus extremos una cascada de 30 metros ha hecho a través de los siglos una especie de playa, la arena es fina, ahora sé que es como la arena de mar. Huele a humedad, a tierra mojada, esta muy fresco, como sentarse bajo un arbol en dias calurosos o abrigarse bajo una iglesia de cantera en cualquier dia de junio. Igual que en una iglesia, el eco trae y lleva ruidos, algun murcielago, el agua que cae, las voces. Lo mejor, es la oscuridad. La verdadera oscuridad. Solemos pensar que con cerrar los ojos conocemos la oscuridad. Pero es en estos sitios donde no hay ninguna entrada de luz, cuando realmente sabes lo que es la oscuridad. Enciendo una vela, porque no quiero que mi lampara se quede sin pilas. La vela sólo logra alumbrarmi cuerpo y muy poco alrededor, un suspiro la apaga. Y entonces conozco a la oscuridad. No importa si tengo abiertos o no lo ojos, no veo nada. No importa si paso así 30 minutos o un dia, mis ojos no se acostumbran nunca a la oscuridad (como nos pasa cuando entramos a una sala de cine, por ejemplo) y nunca logro ver nada. Pongo mi mano ante mi rostro pero no la veo, entonces comienzo a disociarme, a preguntarme si de verdad estoy ahi, si no habré desaparecido con la luz de la vela, si basta con sentir mi cuerpo. Me relajo y me recuesto sobre mi sleeping; el agua sigue cayendo, a lo lejos escucho voces, parece que alguien viene; pero sé que no es nadie, sé que mi cerebro me esta jugando una broma creandome alucinaciones auditivas. Ya llevo tres dias bajo tierra, en la cueva, en mi cueva. Duermo cuando tengo sueño, muerdo alguna galleta cuando tengo hambre, nunca he estado tan en contacto con mis ciclos vitales, no hay dia o noche que le avisen a mi cuerpo que ya tengo que levantarme o que es necesario que me duerma. Mantengo abiertos los ojos, pero me imagino que los tengo cerrados y por un momento, siento que floto en esa oscuridad que me absorbe. Pienso: ojala así sea la muerte.
Mi animal de poder (el gato) es parte de mi cuerpo, no lo veo, pero sé que esta ahi. La cueva, mi cueva, existe; se llama "Grutas de la Puente", esta en Sierra de Alvaréz y las he visitado 3 veces, la última vez acampé junto a la cascada 3 dias. Ultimamente tengo tantas ganas de regresar, que he logrado recrear cada detalle en mi cabeza y recreo esa imagen mientras duermo.
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